A estas tardías horas lo que menos me apetece es hablarte, por lo menos no con letras.
Me valdría con un beso, quizas, pero lo dudo
porque un beso llevaria a otro beso y asi hasta que amaneciera y viera el sol en tus ojos
y solo entonces, quizás, podria bajar mis párpados y entregarme al descanso...
después de haber sido tuya, después de que hubieras sido mio
añoro tu presencia y ese beso que no tengo y con el que empezaría a amarte.
No sé q haces, no se si duermes, no se si sueñas dormido o despierto
pero si vienes y me lees, quiero que me creas si te digo que...
te amo.